viernes, 2 de octubre de 2015

franklin

He aquí un relato correspondiente de tal vez el mismo evento. "Después de una cena de media tarde organizada por Vergennes, Franklin tuvo el honor, si no el placer, de que se les permita estar al lado de la reina, la famosa y altiva María Antonieta, mientras jugaba en el mesas de juego. Solo entre las multitudes en Versalles, ella parecía tener poco aprecio por el hombre que, había sido informado, una vez que había sido "el capataz de una impresora". Como señaló con desdén, un hombre de ese fondo nunca habría podido a subir tan alto en Europa. Franklinhabría estado de acuerdo. " [1] 1. Walter Isaacson, Benjamin Franklin: An American Life (Nueva York, Simon & Schuster, 2003), 348.

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